miércoles, 2 de septiembre de 2009

Pepe y Elvin: los payasos enterradores de la pelicula

Rodolfo Pastor Fasquelle
Diario Tiempo

Resulta que ahora nadie dio el golpe, salvo los chafas que no tienen dónde esconderse. Muchos empresarios dicen que ellos no fueron, como si no han quedado impresas sus palabras y grabadas sus voces y delatadas, en el exterior, sus maniobras y cabildeos.

Los líderes políticos del golpe dicen que ellos tampoco fueron. Carlos Flores dice que no fue, que “fue Teté”. Pepe se hace el loco y Elvin declara 35 días después que “él no es golpista” y que condena “la forma” aunque condona el fondo. Un sector del PINU repudia tarde a sus diputados golpistas. Pero es obvio que formalmente hablando el Congreso al que también llaman congrezoo, dio el golpe y los diputados respondían a liderazgos políticos. Por eso es que la gente grita en la calle, “diputados golpistas, basura, fuera” y cuando pueden los agarran a patadas en la calle. Sin consenso de los líderes políticos no hay golpe, que Micheletti, al que ahora dejan solo, ni se inventó el golpe ni hubiera llegado a primera base cuando lo mandaron a batear sin ellos.

Alguna vez parafraseando a Swift le comenté al Presidente Reina que yo criaba caballos porque parecen más nobles y racionales que los políticos. No me contradijo y no me desdigo. Deberían ser los mejores entre nosotros. Y son la peor ralea. Mencioné antes (en “yo acuso”) a los principales actores políticos del golpe y, entre los alquimistas y brujos, al de generales conocidas Rafael Callejas y a Carlos F. Facussé ya viejos políticos, que alguna vez juraron la Constitución que ahora rompieron y, ejercieron a su criterio con excelencia, la presidencia de su República que yace aquí, postrada, pero enfrentada a los represores con valentía cuarenticinco días después.

Aunque compite con Arturo Corrales, Flores es el más cínico. Como dice que está escribiendo una memoria quiero ayudarle. Llegó a diputado con la bendición del rodismo e intervino muchas veces en la redacción de la constitución que ahora rompió diz que para preservarla. Obtuvo renombre porque se lo quiso lanzar como candidato cuando fue ministro de la presidencia de Rosuco, a cuyas órdenes además acudió al Congreso, acompañando a Mich con un Proyecto de Ley para que la Cámara se declarara una constituyente y reformara los artículos pétreos, que ahora tan apasionadamente defiende.

Tantas cosas se pueden decir de Carlos Flores, peligroso e irritable, al que mucha gente teme. Y que se cree amado. Hijo de golpista, padre de golpista. Padrino del usurpador y de los jueces, fiscales, procuradora y jefe de la bancada del golpe.

Carlos ha estado tratando de echar para atrás desde el día
del golpe, cuando vio lo que venía, diciendo a quien lo escuche “es que no era así hombre y yo les dije, pero no me hicieron caso”. Desde la semana pasada empezó a imprimir en su rotativo la opinión adversa al golpe de mi maestro Gautama B. Fonseca. Pero por supuesto que Ud. conspiró Ingeniero. Todos sabemos lo que les dijo a los demás y de su papel de padrino. Fue público que los golpistas lo visitaban, los barones de los medios, pero también la junta de comandantes, los capos y sus diputados.

Su periódico hizo la propaganda golpista que preparaba la obra y montaba el escenario. Sus editoriales y sus pildoritas siempre han sido golpistas aun cuando quisieron parecer despreocupadas en el cinismo. Ud. es un villano Señor, no hay manera que pueda evadir la infamia de la crónica. Su padre fue más cauto. A Ud. sus propios escritos lo condenan. La historia no perdona, desmonta la propaganda.

Idéntico destino tendrán los otros políticos que conspiraron, aunque pretenden también distanciarse del golpe, Elvin Santos y Pepe Lobo, Nadie va a votar por Uds. Señores. Van a tenerse que inventar los votos cuando las encuestas les dan en su propio partido un tercio de opinión favorable a cada uno contra una mitad de opiniones negativas. Ya es muy tarde para andarse arrepintiendo. Y nadie los va a perdonar. Estuvieron en las mesas de negociaciones y todos sabemos que pudieron, como candidatos de sus Partidos frenar al Congreso. Pepe se quiso pasar de listo y perdió su segunda oportunidad, Santos la única que va a tener. Entrambos enterraron el sistema bipartidista centenario.

Ningún liberal bien nacido debe votar por Elvin Santos, el enterrador del Partido más grande del istmo. He conocido a varios malos candidatos, pero ninguno tan necio y tan destructivo como este incontinente Cantinflas, este payaso mojado. Nadie debe recibirlo en una casa honorable, so pena de que quede marcada. Nadie debe escuchar sus súplicas. Nadie debe hablar con él ni voltearlo a ver ni comprar una camiseta blanca en los malls.

Pero no hay que llorar por ese sistema que parecía que iba a durar para siempre y que nunca íbamos a tener partidos que plantearan ideas, propuestas diferenciadas, compromisos reales con la gente. Puede ser que quede, a la vista, sobre el lodo con que lo cubrieron, una mano tiesa, calcinada y agrietada de sol, extendida saludando a estos nombres. Los golpistas abrieron el sistema para que se establezca esta nueva alianza de organizaciones sociales y la UD y el progresismo rojiblanco variopinto, comprometido con el pueblo, que va a ganar las próximas elecciones contundentemente y va a escribir páginas gloriosas de nuestra historia y una nueva constituyente.

No hay comentarios:

Publicar un comentario