COMUNICADO DE PRENSA CPTRT

From: Francisco Javier

Tegucigalpa, 07.08.09.

Desde hace más de un mes, Honduras, país con un grave registro de violaciones a los derechos humanos, se ha alejado descaradamente de sus obligaciones nacionales e internacionales de respecto a los derechos básicos y libertades fundamentales. Así lo demuestran los informes de las distintas organizaciones, que atestiguan la existencia de un patrón de flagrantes abusos a los derechos y libertades, especialmente civiles y políticos.

El CPTRT condena el uso excesivo de la fuerza y abuso de la autoridad del gobierno de facto, y de manera particular, los actos de tortura psicológica a los que se han visto sometidos un gran número de personas, que han ejercitado su libertad de expresión – no solo periodistas y líderes sociales sino también ciudadanos/as que han utilizado medios de comunicación nacionales e internacionales para expresar sus ideas y opiniones sobre la situación que actualmente se vive en Honduras.

Según la Convención Contra la Tortura y Otros Tratos o Penas Crueles, Inhumanos o Degradantes, constituyen también actos de tortura aquellos mediante los cuales se inflinje intencionadamente a una persona dolores o sufrimientos graves, no solo físicos sino también mentales que buscan la intimidación y la cohacción. Estos sufrimientos deben de ser llevados a cabo por funcionarios públicos, personas en el ejercicio de funciones públicas, a instigación de estas, o con su consentimiento o aquiescencia.

El CPTRT ha tenido conocimiento y documentado el caso de una persona de nacionalidad hondureña que fue víctima de intimidación telefónica luego de escribir un artículo en un medio de comunicación en donde pedía la desarticulación del ejército como ente represor. La víctima recibió repetidas llamadas telefónicas de tono intimidatorio, los días posteriores a la publicación del artículo, en las que únicamente se escuchaba un sonido fuerte de cuchillos de metal. Además, recibió numerosas llamadas en las que no hubo respuesta sino largos silencios.

El CPTRT expresa su preocupación y al mismo tiempo llama la attención sobre la probable implicación del Ejército en el incidente anteriormente mencionado, que desafortunadamente no constituye un caso aislado.

Por todo lo anteriormente expuesto, pedimos a la comunidad internacional que haciendo uso del derecho interncional exiga responsabilidad al regimen de facto por las evidentes violaciones a la integridad física y psíquica de las personas que hoy en Honduras se atreven a ejercitar sus derechos más básicos.

La paz, que es lo contrario a la violencia hay que construirla desde dentro de nosotros mismos para ser capaces de transmitirla.