Manifiesto Pueblos del Mundo

El pueblo hondureño está viviendo horas de incertidumbre. La calma que el mundo observa es aparentada por las corporaciones televisoras y radiales y los medios escritos (únicos con libertad de transmisión por estar del lado de los golpistas), que tratan de ocultar la verdad de lo que ocurre: el pueblo intenta sacudirse el gobierno espurio, surgido de las ambiciones de un sujeto oscuro, apoyado por los grupos que han ejercido el poder fático a lo largo de los años de historia de nuestro país.

La comunidad internacional debe saber que:
1. Nuestra Constitución no contempla la remoción del Presidente, como quieren hacer creer los golpistas, debido a que hay independencia de poderes y un poder no puede inmiscuirse en la atribuciones del otro.

2. Los golpistas llegaron al colmo de falsificar documentes para avalar el asalto. A pesar de que todos nos dimos cuenta de que el Presidente Zelaya fue sacado de su casa en ropa de dormir en horas de la madrugada, fue presentado el congreso una carta de renuncia, fechada el 25 de junio, en donde el Presidente de la República comunicaba su renuncia y la de su gabinete. Es la sesión en la que se presentó dicho documento se suscitaron contradicciones: algunos de quienes tomaron la palabra, a pesar de tener la supuesta carta de renuncia, se referían a la acción que habían tomado como una defenestración.

3. Si bien la presidencia está ocupada por una persona civil, nombrada fraudulentamente por un congreso que ya no representa los intereses del pueblo, su accionar está sustentado en el poder militar que está reprimiendo al pueblo que se manifiesta en las calles; por tanto, el régimen constituye el germen de una dictadura.

4. Se violentan a diario nuestras garantías constitucionales: se promulgó toque de queda, en algunos lugares desde las 6 de la tarde, hora desde la que las personas deben permanecer en sus casas.

5. Se reprimen las manifestaciones pacíficas con mucha saña y sin respetar las condiciones de las personas: mujeres, ancianos.

6. Los dirigentes están siendo perseguidos, incluso a autoridades legalmente electas. También han sido mancillados la dignidad de intelectuales y periodistas: El caricaturista Allan Mcdonald fue detenido junto a su hija de año y medio, llevado a un lugar y metido en un lugar oscuro. Asimismo, el periodista Edras Amado López ha sido objeto de una cacería humana. Varias personas fueron golpeadas, entre ellas se encuentra la esposa del candidato del partido Unificación Democrática, César Ham, quien fue herida en la cabeza cuando participaba en una manifestación en la ciudad de El Progreso. Asimismo, el dirigente comunitario Marcelino Martínez está detenido.

7. Pesa orden de captura contra varios dirigentes: Rafael Alegría, Carlos H. Reyes, entre otros, y contra funcionarios del gobierno del Presidente Zelaya, incluso contra él mismo.

8. Radio Progreso, emisora católica independiente es Agredida constantemente, ya que es uno de los pocos medios que informa al mundo lo que está sucediendo. El día 30 de junio su señal fue sacada del aire, sus emisiones se reiniciaron hasta el día 1 de julio. La radio Globo fue asaltada y sus equipos destruidos.

9. Estamos desinformados. Las compañías de cable sacaron del aire los canales internacionales de noticias CNN, Fox, Caracol, TVE, a través de los nos enterábamos de lo que ocurría, y sólo dejaron el aire los que transmiten en inglés.

10. El pueblo hondureño está en la indefensión: Los operadores de justicia, Ministerio Público. Corte de Justicia, Comisionado de los Derechos Humanos, policía, están coludidos con los golpistas. Nada que pretendamos hacer para reclamar nuestros derechos encontrará eco en estos organismos.

Hago un llamado a la comunidad internacional a mantener su solidaridad con nosotros y acelerar las acciones que conduzcan a restablecer nuestras garantías constitucionales y el retorno de la legalidad a nuestro país. No se debe permitir que la dictadura tome fuerza y se entronice en nuestro país, destruyendo las aspiraciones del pueblo hondureño de construir un sistema democrático incluyente y participativo.

Manuel de Jesús Pineda
Escritor